En un comunicado por varios medios el presidente Luis Arce exigió el levantamiento inmediato del bloqueo de carreteras que lleva 17 días, advirtiendo que, de no hacerlo, ejercerá sus facultades constitucionales para proteger el interés del pueblo boliviano. Arce denunció que el bloqueo, al que calificó de «antidemocrático y criminal», busca la candidatura del exmandatario Evo Morales y la anulación de las causas judiciales en su contra. Durante estos días de bloqueo, se han registrado 70 personas heridas, incluidos civiles, policías y periodistas.
Una vez más el presidente dice en medios que hará lo que manda las instancias constitucionales vigentes ante este tipo de hechos provocados por seguidores de Evo Morales quienes quieren imponer a su candidato para los comicios del 2025, pese a que hace varios días atrás en una conferencia dio un discurso similar.
Varios analistas y politólogos de izquierda y de centro en varios medios defienden dos posturas en esencia: una es que no existe una ruptura del MAS y todos estos acontecimientos, desde los bloqueos y los heridos, son una obra orquestada y la otra; es que hay dos alas en el Movimiento al Socialismo, los Arcistas y Evistas que están enfrascados en una lucha de poder y en esta lucha conllevará a que uno solo esté a la cabeza de los movimientos sociales para obtener la presidencia.
Sobre el primer punto los analistas defienden la postura en base a hechos pasados en varios países donde se llevaron a cabo similares conflictos relacionados con la izquierda, como son Cuba y Venezuela, donde dos facciones de la misma línea política se enfrascan en una lucha fuerte para luego uno de ellos salirse de la contienda dejando al ganador, pactado, el liderazgo absoluto del movimiento, para el caso de Bolivia los politólogos y analistas que apoyan esta teoría indican que Arce no sacará a las fuerzas armadas y que con el tiempo ante su supuesta inoperatividad dejará el gobierno junto con el vicepresidente, quedando Andrónico como presidente interino, dejando la vía libre para que Evo Morales vuelva al poder.
La segunda opción de otro grupo de analistas y politólogos de izquierda y de centro, concuerdan que hay una ruptura muy fuerte de poder debido a prebendas, cargos en disputas y favores que se están cobrando debido al apoyo que se les dieron en su momento a cada uno de los representantes de estas dos facciones, Arce y Evo. En el tema del presidente muchos analistas, periodistas, politólogos de centro y de izquierda señalan que asesores de Arce se reunieron en Washington propiciados por el gobierno de Biden, con asesores de Manfred Reyes para lograr un acuerdo con la misiva de que Evo Morales no vuelva a poder.
Ambas teorías políticas tienen posiciones que según ellos pueden corroborar y que confirman su análisis acerca de lo que puede acontecer en base a lo que el Movimiento al Socialismo busca establecer en Bolivia para el 2025.
Sin embargo, ante la idea de muchas personas que sienten que la pelea se suscita entre los que son masistas y los que no lo son, existe un gran porcentaje de personas que no están de acuerdo con ninguna posición debido a que todas las propuestas presentes no dan la certeza de mejorar la crisis y la calidad de vida de los bolivianos. Ni los 100 días de recuperación que propone un candidato hasta la desaparición de la sigla del MAS, las propuestas de todos rondan siempre bajo el mismo eje, estatismo y asfixia a los empresarios y emprendedores con regulaciones en mayor o menor grado.